martes, 14 de octubre de 2014

Charla Aves Fósiles de China fue presentada con éxito en Santiago

El pasado lunes 6 de octubre se presentó en Santiago la Dra. Jingmai O’Connor, Paleontóloga del Instituto de Paleontología de Vertebrados y Paleoantropología de la Academia China de Ciencias de Beijing, invitada por la Fundación Chile Hace Ciencia con el patrocinio de la Universidad Central, Infocyt y ACHIPEC.

En su charla “Las Aves Fósiles de China”, la doctora O’Connor presentó su trabajo en el grupo de aves fósiles llamado Enantiornithes, un grupo que se diversificó durante el período Cretácico y del cual se conservan fósiles en excelente estado. El trabajo de la Dra. O’Connor se ha centrado principalmente en la denominada “Fauna de Jehol”, China, donde los restos de aves corresponden al segundo ensamble de aves más antiguos, después del de Solhofen, Alemania, donde fue descubierto Archaeopteryx. Sin embargo, Jehol es mucho más diverso, en abundancia y diversidad de especies.

El excelente estado de conservación de los fósiles de los sitios de estudio de la Dra. O’Connor le han permitido estudiar no sólo los restos óseos de estos animales, sino también estructuras blandas como las plumas, el tracto digestivo y el sistema reproductor. Gracias a esto, ha sido posible hipotetizar acerca del color del plumaje de estas aves ancestrales, distinguir entre individuos machos y hembras, estudiar el dimorfismo sexual, la conducta alimentaria y la evolución de las diversas estructuras que se han mantenido y las que han desaparecido y vuelto a aparecer en la historia evolutiva de las aves.

Según los estudios de la Dra. O’Connor, todos estos antecedentes permiten mostrar que la evolución no sigue un camino progresivo sino uno mucho más complejo del que nos cuentan los libros de texto.

A la charla asistieron alrededor de 100 personas de todas las edades, muchos de ellos estudiantes y profesionales de diversas áreas, quienes expresaron su alegría de contar con este tipo de iniciativas dirigidas a un público general, que esperamos repetir en el futuro.



lunes, 13 de octubre de 2014

Científicos chilenos descubren nueva especie de murciélago para el país en la Pampa del Tamarugal

Los murciélagos, aquellos pequeños mamíferos voladores asociados a vampiros o enfermedades, representan un 25% de los mamíferos terrestres del mundo y viven en una gran diversidad de hábitats en todos los continentes con excepción de los polos. En Chile existen 12 especies de murciélagos registradas, de las cuales la mayoría son insectívoros y habitan la zona centro-norte del país.

Un nuevo estudio realizado en la Reserva Nacional Pampa del Tamarugal, Región de Tarapacá, por Gonzalo Ossa y Cristian Bonacic del Laboratorio Fauna Australis, Universidad Católica de Chile, y Rubén Barquez de la Universidad Nacional de Tucumán, Argentina, con el financiamiento del SAG Tarapacá, ha informado acerca de la presencia de una nueva especie de murciélago para el país, el murciélago orejón de Thomas (Histiotus laephotis), además de extender hacia el norte la distribución de otra especie ya conocida, el murciélago orejudo chico (Histiotus montanus).

Gonzalo Ossa, autor principal de este estudio, nos contó acerca de este nuevo descubrimiento y de cómo es la experiencia de trabajar con estos animales.


¿Cómo es trabajar en terreno estudiando murciélagos?

Sacando un H. montanus de la red de captura
No es fácil y posiblemente esa es la gran razón del porqué en Chile han sido tan poco estudiados. Los terrenos son de noche y dependiendo del lugar, uno se somete a diferentes riesgos como caídas, asaltos, frío, etc. Por otro lado, capturar murciélagos es sumamente difícil, puesto que al utilizar la ecolocación para navegar y cazar, los murciélagos son capaces de detectar las redes y evadirlas perfectamente, muchas especies son casi imposibles de capturar porque vuelan en altura, o porque tienen un sistema de detección muy preciso. 

Sin embargo a mí me entretiene, es siempre un desafío. El hecho de que hayan sido tan poco estudiados en Chile me mantiene siempre con la esperanza de encontrar alguna especie nueva o profundizar los conocimientos sobre las ya existentes. Además hay que lidiar con su capacidad de detectar las redes y para ello ser estratégico en la colocación de estas. ¡Hay que pillarlos desprevenidos!